Los mineros ilegales siguen haciendo de las suyas en el cerro el Toro, Huamachuco. Esta vez, campesinos denunciaron una presunta contaminación por parte de la labor Minerals Doña Julia que estaría arrojando relaves mineros a la vía comunitaria de Shiracmaca, en la provincia de Sánchez Carrión.
Los comuneros relataron que el último domingo cuando llevaban sus ovejas a pastar y beber agua tuvieron que arrearlas hacia otra dirección al percatarse que de dos camiones se arrojaban relaves mineros en la mencionada vía comunitaria. Alertados tuvieron que avisar a quienes también trasladaban pequeños rebaños a la zona.
Anteriormente en el lugar unas ocho ovejas murieron al tomar agua cianurada en los alrededores de la empresa ilegal Minerals Doña Julia, propiedad del también investigado por homicidio Jorge Espejo Moreno. Según el portal Rimashun de Huamachuco, informó que los camiones habrían salido de la citada empresa que fue excluida del Reinfo y a la que ninguna autoridad fiscaliza.
En las fotografías se observan los volquetes que cargaron y arrojaron el relave en la vía lo que perjudica al suelo y subsuelo por las infiltraciones de estos desechos tóxicos y representa un grave riesgo para los campos de cultivo y fauna del lugar.
Según el portal de información, las unidades de placas BOZ-847 y T8E-932 son propiedad de Ángel Ruiz y Elmer Contreras y no descartan que hayan sido contratados por Félix y Omar Escobedo, socios de Espejo. “Las placas de los vehículos deberían ser investigadas por la Policía. Pero ellos nunca aparecen por aquí. Esa empresa Minerals Doña Julia no debería funcionar pero sigue haciéndolo porque las autoridades no hacen absolutamente nada porque tendrían amistad con el dueño”, señalaron los campesinos que además evitan encontrarlo por miedo a las amenazas.
Luego de los atentados y destrucción de cámaras de seguridad reportadas hace días en la zona, con denuncia e investigación policial incluida, los periodistas utilizaron un dron para tener registros de la depredación ambiental que se ejecuta en la zona. Y se debe hacer con personal de seguridad ante las amenazas y disparos de personas que laboran en empresas suspendidas por el Estado. Sin embargo, cuando trataron de sobrevolar el dron varios disparos desanimaron su intención. La impunidad reina en la zona.
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